lunes, 25 de julio de 2011

¿Y yo qué cámara me compro? - 3.a) Las réflex: ¿Dónde me sitúo?

Bien, hemos pasado por las compactas y las Evil, pero a día de hoy lo más de lo más tanto en ergonomía como en manejabilidad son las réflex. En la práctica, en calidad de imagen algunas Evil (las Sony Nex sobre todo, con su sensor “tamaño réflex”) pueden rivalizar con ellas, pero todavía las réflex son las “profesionales”.
Lo primero que hay que preguntarse aquí es qué es una réflex y por qué se llaman así. Pues todo proviene del conjunto de espejos que se utilizan para desviar la imagen que pasa por el objetivo y conseguir que aparezca en el visor. En las compactas y las Evil el visor es electrónico y lo que muestra es lo que recoge el sensor a través de una pequeña pantalla. Existe la excepción de algunas réflex Sony que usan un espejo translúcido y que también usan visor electrónico en lugar de óptico, pero no las trataré aquí.



Una vez decidido que sí, que queremos una réflex porque nos gusta su ergonomía, queremos un manejo “pro” o simplemente porque nos gusta fardar, viene el problema de cual escoger, ya que hay una gran cantidad de marcas y modelos. Pues sí, ahora viene el gran problema.
Desde mi punto de vista, antes de ver marcas y empezar a hacer toda clase de comparativas de especificaciones que no hacen más que marear, creo que lo adecuado es intentar peinar el mercado con los tipos de cámaras que hay.
  • Cámaras de iniciación básica: Son los modelos básicos de cada marca, los que tienen de oferta habitualmente. Suelen ser suficiente para la mayoría de usuarios que empiezan y son los más baratos, pero a cambio suelen tener elementos tecnológicos más antiguos o menos controles manuales. También son las cámaras más pequeñas de tamaño. Son mi recomendación para el novato completo. Ejemplo: Canon 1100D

viernes, 8 de julio de 2011

Nueva York

De acuerdo, este es un blog de fotografía, pero creo que también hay espacio en él para exponer lo que uno siente, lo que uno piensa en determinados momentos.
Cuando uno piensa en algún lugar del mundo al que una persona debe ir al menos una vez en la vida, surgen varios nombres, pero uno de ellos es sin duda Nueva York. Ciudad de contrastes, de luces y de sombras, un universo en sí misma, Nueva York se reinventa como capital del mundo moderno mientras trata de cicatrizar la terrible herida del 11S.
Es realmente curioso cómo se puede pasar en pocos kilómetros, y simplemente andando un rato, desde Chinatown a Little Italy, de China a Italia, y de ahí a la milla de oro de la 5ª avenida y sus tiendas “pijas” o subir a Harlem, dentro de la misma Manhattan, que no es a su vez sino un “barrio” de Nueva York.

Confieso que yo he visto poco del NY profundo. Más bien me he dedicado a hacer el turista de la manera más típica que se pueda encontrar, pero aun así creo que he conseguido respirar algo del aire de Nueva York que hace que esa ciudad hipnotice.
Lo primero que asombra en un viaje como este son los preparativos. Eso de tener que decirle al gobierno que sí, que voy a ser bueno, que no voy a meter una enfermedad en el país o que no soy un espía… ¿pero es que alguien en su sano juicio va a decir que sí, que es un espía? Y luego la larga cola a la entrada de la aduana en el JFK… desesperante. No es un buen comienzo, la verdad, menos mal que luego la cosa mejora:
Hotel en la calle 42, y hora de pasear. Times Square está cerca, los musicales de Broadway me esperan, y los rascacielos que pasan a mi lado son objeto de mi codicia fotográfica.
Paseo por Harlem y por Central Park en domingo. Un día magnífico que hace que la gente salga a tomar el sol, merendar en el parque y disfrute de la ciudad.
El sol se pone, y Times Square brilla como si no hubiera noche. Anuncios, consumo, tiendas. La meca del mercado.
La zona cero. Lugar de profunda herida. La cicatriz se intenta recomponer con nuevas torres, pero la imagen persiste.
La subida al rascacielos. Rockefeller o Empire, subir a una de las cimas de la ciudad da una perspectiva diferente. Normalmente por NY se mira hacia arriba, pero aquí se mira al horizonte y hacia abajo. Muy recomendable realizar la visita durante el anochecer. Ver despertar poco a poco las luces de la ciudad y observar como poco a poco van ganando la batalla al sol no tiene precio.
Acostumbrados como estamos los europeos a hacer el turista buscando cascos antiguos y monumentos clásicos, es extraño adentrarse en una ciudad en la que eso no existe. Los monumentos son todos modernos, no existe un “casco antiguo” y todo está diseñado a una escala monstruosa. Es necesario cambiar la mentalidad cuando se va allí, pero una vez que se consigue es una ciudad para disfrutar.
Al principio dije que NY es una ciudad para ir al menos una vez en la vida. Pero una vez que vas, ¿puedes ir solo una vez? Esta ciudad engancha…

sábado, 26 de marzo de 2011

¿Y yo qué cámara me compro? - 2) Las EVIL

Recientemente ha entrado en el mercado un nuevo concepto de cámaras que intentan aunar lo mejor de dos mundos: la portabilidad de una compacta y la calidad de una réflex. Estas cámaras se denominan EVIL (del inglés Electonic Viewfinder, Interchangeable Lens) y consisten en un cuerpo relativamente pequeño, con visor electrónico y pantalla como una compacta pero un sensor de tamaño grande y un conjunto de lentes intercambiables.
La idea de esta clase de cámaras es conseguir una alta calidad con objetivos específicos dedicados y con un sensor de gran tamaño. Por otra parte, se busca la portabilidad eliminando los elementos del visor óptico y sustituyéndolo por la visión a través de la pantalla trasera. Algunos modelos tienen la opción de un visor externo que se acopla en la parte superior.
Las principales marcas que hasta ahora han sacado este tipo de cámaras son:
  • Olympus: Pionera en este segmento, denomina a su línea PEN, por lo que a menudo se le llama a este tipo de cámaras con ese nombre. Su sensor es de tamaño 4/3 e incluye estabilizador de imagen en el propio sensor. Tanto futuro le ve Olympus a este tipo de cámaras que recientemente ha anunciado que deja de desarrollar (y en un futuro fabricar) réflex para centrarse exclusivamente en las PEN. Sus cámaras son las EP y las EP-L.
  • Panasonic/Lumix: Gemela en tecnología a Olympus y con el mismo sensor, ha decidido poner el estabilizador de imagen en los objetivos. Su nomenclatura es el modelo GF. Esta marca tiene además un tipo de cámaras con el visor electrónico integrado en un pequeño visor, siendo en realidad una especie de mini-réflex pero con visor electrónico. Se denominan serie G y GH, estando esta última especialmente dedicada al video.

domingo, 20 de marzo de 2011

El sensor de una cámara o "el tamaño importa"

De vez en cuando, cuando voy con mi réflex por ahí, llega alguien y me pregunta "ostras, vaya pedazo de cámara, ¿cuántos megapíxeles tiene?". Y cuando le digo la cifra, esta persona se asombra y me dice "pues vaya porquería, mi compacta tiene más". El concepto de muchos megapíxeles=buena cámara es un error bastante común que conviene evitar cuanto antes. A partir de cierto número (6-8 Mpx), lo importante no es el número de megapíxeles, sino el tamaño y la "calidad" de estos. No creo que haya mucha gente que vaya a imprimir posters de 2 metros de lado, pero sí que le gusta que las fotos salgan bien cuando las ven en el monitor.

Sin ir más lejos, alguna que otra vez, algún usuario de compacta me ha preguntado que por qué le salen las fotos tan mal por la noche. No se ve casi nada, no se distinguen los colores...
Todo esto tiene una respuesta muy simple, y es que el tamaño importa (al menos en lo que se refiere al sensor)
¿Y qué es el sensor?, pues es la manera en la que la cámara recoge la luz que recibe.


El sensor está compuesto de un montón de receptores de luz, estando ese número relacionado con los megapíxeles de las cámaras. Nos podemos imaginar que estamos en una cabalgata de Reyes Magos y queremos recoger los caramelos que nos tiran. ¿Nunca habéis puesto un paraguas boca abajo? Bueno, pues no es lo mismo tener un paraguas pequeño y estar rodeado de un montón de gente con paraguas que tener espacio libre y un paraguas super grande. El del paraguas grande seguro que recoger más y mejores caramelos. Pues aquí igual, el sensor más grande seguro que recoge más y mejor luz, por lo que si hay poca luz, seguro que vemos mejor.

jueves, 17 de marzo de 2011

¿Y yo qué cámara me compro? - 1) Las compactas

Como supuesto "entendido" en fotografía, es muy habitual que te llegue algún amigo y te pida consejo a la hora de comprarse una nueva cámara. El requerimiento más común suele ser: "Quiero una cámara que haga buenas fotos". Y con eso se quedan tan anchos... ahora le toca a uno adivinar qué es lo que realmente necesitan: portabilidad, resolución, bajo ruido, zoom...
Y es que el mercado es tan amplio y las necesidades son tan variadas, que es imposible recomendar nada general, sino que cada caso es único y hay que ver lo que se necesita. De todos modos sí es cierto que existen algunos casos habituales:
  • El fiestero: Este caso es el típico que lo que le gusta es hacer fotos en las juergas nocturnas y en las barbacoas pasadas de rosca. Se ve que su móvil no le resulta suficiente (o no lo quiere sacar para destrozarlo mientras hace fotos) y "necesita" una cámara de fotos. Si estás en este caso, no te compres nada y haz fotos con tu móvil, y si aún así quieres una cámara de fotos, pilla la más barata que puedas, a fin de cuentas la vas a destrozar. Eso sí, procura que tenga flash, que en las juergas nocturnas no se ve nada si no.
  • El comodón: Este es uno que quiere hacer fotos a lo que encuentre, pero no quiere que su cámara abulte nada porque le molesta. No le importa calidad, manejabilidad... Si estás en este caso, lo mejor es que hagas fotos con el móvil porque siempre lo vas a llevar encima. Si aún así necesitas una cámara, lo mejor es una ultracompacta extrafina, y mejor si el objetivo no abulta. No te preocupes de zoom digital o megapíxeles, lo que quieres es portabilidad.
  • El del zoom: Este lo que quiere es un objetivo superzoom, que tenga la mayor cantidad de X ópticos posibles porque le quiere sacar las legañas al gorrión que por la mañana se posa en su ventanal. Si lo que te gusta es el zoom, tu caso es el de una bridge o una compacta superzoom. El objetivo no suele ser de calidad, pero las fotos las hace. Eso sí, son carillas y abultan bastante.
  • El viajero: Este es uno de los más complicados, porque quiere todo en uno: portabilidad, zoom, poco ruido cuando hace fotos en interiores, megapíxeles para ampliar las fotos de la mujer delante de la torre Eiffel y colgarla en el salón... En este caso, lo adecuado es una compacta avanzada de las carillas. Si se quiere calidad, hace falta un objetivo de poco zoom (a más zoom menos calidad, sorry)
  • La segunda cámara: Existe una última gama de usuarios que suelen tener una réflex, pero que les resulta pesada y requieren algo más ligero. Acostumbrados como están a una gran calidad y a muchos controles manuales, no se conforman con cualquier cosa. Para esos sólo sirven las cámaras compactas de gama alta con alto grado de configuraciones manuales, al estilo de la serie G o S de Canon o las Panasonic LX.

miércoles, 16 de marzo de 2011

¿Otro blog más de fotografía?

A menudo, la creación de un blog depende de tener algo que contar y tiempo para hacerlo.
El tiempo no es algo que abunde precisamente, pero de mi experiencia durante dos años como profesor del Gap 2.0 en Canonistas: http://www.canonistas.com/foros/talleres/127179-gap-v2-0-a.html, hay muchas cuestiones que han ido surgiendo y que merecen ser planteadas. Desde simplemente qué cámara escoger, o la eterna duda entre PC y Mac, hasta cómo trabajar con flashes baratos.
En cualquier caso, hablar de fotografía muchas veces no es más que participar de una forma de vida, de una forma de ver el universo, y por lo tanto puede ser una excusa para simplemente hablar de las cosas que pasan y de cómo se ve el mundo a través de una cámara de fotos.
Pues sí, otro blog de fotografía, ¡qué le vamos a hacer!